¿Qué va a encontrarse el lector de “Usted primero”: un tratado de buenas maneras, un ensayo de normas básicas de cortesía o es algo más que eso?
M. R.: Mucho más que eso. Va a encontrar un libro de reglas no escritas, cómplices, observadas, investigadas y vividas. Reglas que nadie suele compartir y que hemos recogidos desde nuestra experiencia y documentándonos a través de la literatura, el cine, la filosofía, la psicología o el arte para poder aportar, también, la de sus grandes representantes.
¿Cómo surgió la idea de escribirlo conjuntamente y cómo se han organizado para escribir un libro a cuatro manos? ¿Cómo repartieron su trabajo?
M.R.: Surgió porque ambas compartimos la pasión por el Debrett’s Etiquette and Modern Manners, una biblia de las buenas maneras británicas que no solo recoge normas, sino también una filosofía de vida. Mi marido señalaba muy especialmente una de las definiciones de elegancia que recoge el libro: la de no hacer daño a los demás. Y desde ahí, a nosotras, que también compartimos comida casi semanal, se nos ocurrió reinterpretar el Debrett’s y dotarlo de más contenido. Lo llenamos no solo de literatura, cine, filosofía o arte y de las experiencias de grandes personalidades, además de las nuestras, sino sobre de mucho humor. Era imprescindible para que no fuera un aburrido libro al estilo de los de esos pedantes que se creen por encima del mundo.
En cuanto a la repartición del trabajo, dividimos el libro en dos partes, la primera con temas fundamentales, como el amor, el sexo, la muerte, la religión, la política, los viajes y la segunda con algunos más triviales como recibir en casa o la moda, los regalos, el dinero, el trabajo o Internet, aunque otros también de vital importancia como la descodificación de hombres y mujeres o el manual del perfecto impostor –desde el que ayudamos a ser un poquito impostor en esas ocasiones que hay que compartir en mundos de los que se desconoce casi todo. Cada tema tanto de la primera, como de la segunda parte como de la segunda, contiene epígrafes pares, que nos jugamos a cara o cruz. Y el que le tocaba a una luego se lo pasaba a la otra para que escribiera lo que quisiera. Y hemos coincidido tanto, que hay párrafos que tienen dos líneas de una y dos de otra. Nadie distingue quién ha escrito qué. Parece obra de una tercera escritora.
C.P.: Es un libro políticamente incorrecto que cuenta todas las reglas no escritas. Las impresiones sobre nosotros que la gente percibe de forma inconsciente y que “procesa” para tomar decisiones. En otras palabras. Esos secretos lenguajes (corporales, gestuales, etc.) que todos emitimos y recibimos. Quien los domina y los puede utilizar a su favor, juega con ventaja a la hora de encontrar pareja, tener éxito en los negocios, progresar en el trabajo, etc.
¿Cuáles son las reglas no escritas más difíciles de conocer?
M. R: Pues probablemente la importancia que tiene escuchar. Todo el mundo debería saber que escuchar es una de las mejores tácticas para seducir y sin embargo no son demasiadas las personas que escuchan. También es imprescindible saber que la verdad está muy sobrevalorada y que esas “verdades como puños” pueden hacer mucho daño. No se trata de mentir, sino de eludir verdades innecesarias que no aportan nada y pueden hacer mucho daño. Y algo que también es muy importante es descubrir que la elegancia es no hacer daño a los demás, pura generosidad y que no tiene nada que ver con ir bien vestido, ser poderoso o tener dinero. Hay muchas más…, pero para eso está el libro.
Una de las mejores herencias que nos pueden dejar nuestros padres y abuelos es la educación, y siempre se ha dicho que “educación y modales abren puertas principales”. ¿Por qué creen que se están perdiendo las formas?
M.R.: En realidad las formas no se pierden, se transforman. La esencia de las formas, no varían, porque, en realidad, todos sabemos lo que está bien o lo que está mal. Otra cosa es que las normas concretas se vayan actualizando. Ahora ya no hay normas para duelos porque no se celebran… Pero todas las tribus, es decir, todos los colectivos de cualquier tipo, para sentir su pertenencia, tienen unas reglas, ya sean banqueros, artistas, skaters o grafiteros. Las normas son menos estrictas ahora en algunas cosas porque había antes algunas muy rígidas con poco sentido; pero hay otras normas que se han endurecido, como son las de la seguridad, por ejemplo. En todo caso, quien conoce las normas, quien sabe como comportarse en cualquier situación, tiene mucha ventaja sobre los demás. Y además, es cuando no conoce las normas cuando uno puede saltárselas con toda tranquilidad y sin hacer el ridículo.
¿Qué es para ustedes la elegancia y con que suele confundirse?
M. R.: La elegancia es no hacer daño a los demás. Y no darle tanta importancia a nada que llevemos puesto como para que, si se nos estropea nos olvidemos de lo importante, que son las personas. La elegancia no es otra cosa que generosidad para saber respetar los límites del contrario y procurar que la convivencia sea más feliz.
C.P.: La elegancia no es vestir bien, no es con qué se come el caviar
Aquellas tres normas básicas para la convivencia son…
M.R.: 1.- Respetar los límites.- 2.-Procurar no hacer daño a los demás 3.- No actuar con los demás como no queremos que lo hagan con nosotros.
¿Tienen buenas maneras nuestros políticos? ¿Le enviarían su libro a alguno o a sus asesores?
M.R.: Se lo enviaríamos con un lazo muy grande. Da lo mismo como se vistan o como se peinen. Que lleven coleta o corbata. Lo importante es que sean tan generosos como para cuidar su lenguaje corporal y volverlo amable, como para escuchar a sus adversarios, que no deberían ser enemigos y como para alcanzar consensos en vez de destruir las posibilidades de acuerdo. Les vendría muy bien aprender a ser elegantes… O al menos, intentarlo.
Al ser un Blog sobre Madrid, estaría encantada de que me respondieran a estas preguntas también.
Su restaurante preferido es…
M.R.: Tengo muchos. Me gusta mucho la comida japonesa de Kabuki o Sushi 99, el marisco de El Pescador, la originalidad del Bar Galleta, al sabor de Lhardy y de Lucio y el toque personal de Sacha. Por citar solo unos cuantos.
C.P.: “El viajero”
¿Cuál es su cóctel favorito y donde lo sirven?
M.R: Me gusta el ginfizz de Del Diego, el Dry Martini del Meliá Fenix y el Bloody Mary de Le Cabrera.
C.P.: Pisco Sour del Diego
Tienda preferida de Madrid.
M.R.: La librería Méndez, Teria Yabar, Aspesi, Manolo Blahnik y La magdalena de Prous (panadería y mercado ecológico)
C.P.: Elisa Bracci
Truco de belleza y sitio favorito en Madrid
M.R.: El toque ligerísimo de botox en el entrecejo Mira+ cueto. Los tratamientos de Pruden Gil en la clínica Martín del Yerro o los cuidados de Maribel Yébenes. Mi truco de belleza es utilizar todos los días una ampolla de Martiderm con proteoglicanos (media por la mañana y media por la noche antes de la hidratante) y tomar artilane (colágeno +ácido hialurónico) que es buenísimo para las articulaciones y para la piel.
C.P.: La clínica Mira+Cueto de Medicina estética, calle Concha Espina 53
Parque preferido de Madrid
M.R.: El más bonito es el parque de El Capricho, sin duda, pero mi preferido es el que está al lado de la Ermita de Aravaca porque es al que voy con mis hijos.
C.P.: El botánico
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