Este año las rebajas son distintas. Sí, lo son. Por muchísimas razones. La primera de ellas porque de tan esperadas van a saber a poco. Son tantos y tantos los que decidieron que, en tiempo de crisis, lo mejor era regalar la promesa de regalar cuando llegaran las rebajas, que lo de antes y lo de ahora se ha vuelto uno.

Aún así, es cierto que, tal y como andan las cosas, ni siquiera las rebajas animan lo suficiente a gastar, pero al menos reconfortan algo a los comerciantes que han pasado, según cuentan, el peor diciembre de su historia. Ya sólo por el hecho de que se espera que sean, comparativamente, las rebajas en las que más se venda, son distintas; pero además tienen otros elementos que las vuelven diferentes. A saber.

Lee el artículo completo en Wapa – Los secretos de Marta